jueves, 26 de marzo de 2009

Apoyo financiero para el séctor del automóvil


El PE ha aprobado una resolución común sobre el futuro de la industria del automóvil y los efectos de la crisis sobre este mercado. El texto reclama que se acelere, simplifique y aumente el apoyo financiero a este sector, que se reduzcan los trámites para solicitar créditos y que se ayude a las PYME que dependen de este mercado. También exige que se fomente la transformación tecnológica de las compañías automovilísticas y la reconversión de esta industria de una forma "socialmente responsable".
La resolución común, presentada por eurodiputados del PPE-DE, PSE, ALDE y UEN, fue adoptada por 413 votos a favor, 44 en contra y 29 abstenciones. En el texto, la Eurocámara pide que el Consejo y la Comisión "aceleren, simplifiquen y aumenten el apoyo financiero destinado al sector del automóvil, en especial por medio del Banco Europeo de Inversiones (BEI) y la autorización de garantías estatales para préstamos con bajos tipos de interés".

También les insta a que soliciten una simplificación de los trámites administrativos para solicitar créditos y afirma que "el apoyo financiero, en especial mediante préstamos, debería contribuir a estimular la demanda de vehículos nuevos, en beneficio del crecimiento económico, del medio ambiente y de la seguridad vial" (párrafo 6).

También "insiste" en que el BEI "debe prestar suficiente atención" a las pequeñas y medianas empresas (PYME) que son dependientes del sector del automóvil, para garantizar que mantengan "su acceso al crédito".

Por ello, también reclama a los Estados miembros que aumenten la capacidad de este banco para conceder préstamos, de forma que "pueda adaptarse a las necesidades financieras a medio plazo de la industria del automóvil" (párrafo 7).

La resolución afirma que "todas las medidas financieras o fiscales, incluidas las relativas al desguace, deben apoyar y acelerar la necesaria transformación tecnológica del sector, especialmente en lo que se refiere a la eficiencia energética de los motores y a la reducción de las emisiones" (párrafo 8).

Reconversión "socialmente responsable" de la industria automovilística

En el texto, los eurodiputados destacan que estas medidas deberían "contribuir a afrontar la fase de reestructuración y reconversión a que enfrentan la industria del automóvil y la cadena de proveedores", como consecuencia de un entorno empresarial muy competitivo. Por ello, solicitan a la industria que realice estos "ajustes de una manera socialmente responsable, en estrecha cooperación con los sindicatos", y en el marco de una "estrategia económica coherente" (párrafo 9).

Asimismo, reclaman a la Comisión que elabore orientaciones para adoptar un enfoque coordinado para la renovación de la flota de vehículos, "que tengan efectos positivos y a corto plazo sobre la demanda de nuevos automóviles por los consumidores" y que den "un nuevo impulso al mercado del alquiler de automóviles" (párrafo 13).

También piden que se utilicen fondos europeos para fomentar los programas de formación y readaptación de los trabajadores de este sector, y destaca la importancia de realizar "inversiones constantes" en programas de I+D en esta industria (párrafos 11 y 12).

Los eurodiputados enfatizan la necesidad de mantener diálogos con terceros países, especialmente con socios comerciales como Estados Unidos y Asia, "con el fin de garantizar condiciones uniformes en el plano internacional, absteniéndose de adoptar medidas proteccionistas y discriminatorias en el mercado mundial del automóvil" (párrafo 14).

Por otro lado, muestran su satisfacción con el proceso CARS 21, que define una política industrial europea a largo plazo (16).

Además, aceptaron una enmienda en la que el Parlamento Europeo "acoge favorablemente los esfuerzos" de la Comisión para "dar una respuesta política eficaz a las dificultades de General Motors Europe" y "la búsqueda de una solución equitativa y justa al problema de los derechos de propiedad intelectual" (párrafo 5).

Empleo para el 6% de trabajadores europeos

Además, la Eurocámara "observa con creciente inquietud que algunas de las medidas a corto plazo adoptadas a escala nacional por los Estados miembros podrían distorsionar la competencia en el mercado interior y dañar la competitividad", por lo que recalca la importancia de que la UE actúe de forma coordinada en este ámbito (párrafos 2 y 3).

Asimismo, señala que esta industria es "fundamental para la economía de la UE" y recuerda que "emplea directa e indirectamente a 12 millones de trabajadores, lo que representa el 6% de la población activa de la Unión Europea". Sin embargo, los efectos de la crisis económica "afectan especialmente" a la industria europea del automóvil y a su cadena de proveedores".

En 2009 "se registrará un importante descenso adicional en la demanda de automóviles, con la consiguiente reducción de la producción" y del empleo (considerandos C-I).