Una tasa por la contaminación de los camiones

Los eurodiputados estudian una tasa por contaminación para los camiones

Transporte - 10-02-2009

El miércoles 11 de febrero la comisión de Transportes del PE votará una propuesta sobre nuevas tasas para los camiones. No es sólo se gravaría los vehículos pesados por el uso de determinadas carreteras, sino también por el daño medioambiental que producen. Aunque los eurodiputados están divididos sobre la inclusión de la congestión y la emisión de dióxido de carbono como tasas, están de acuerdo en reinvertir los ingresos en el sector del transporte.

El informe sobre la aplicación de gravámenes a los vehículos pesados de transporte de mercancías por la utilización de determinadas infraestructuras, elaborado por el diputado socialista belga Saïd El Khadraoui, será sometido a votación el miércoles 11 de febrero en la comisión de Transporte y Turismo del Parlamento Europeo. Después, tendrá que someterse la valoración del pleno de la Eurocámara, previsiblemente el próximo 10 de marzo. Pagar el precio real Para El Khadraoui, "el sector del transporte debería hacer un esfuerzo por limitar el coste que ocasiona a la sociedad". "Queremos desarrollar un sistema donde los costes externos sean asumidos por quien los causa, y no por la comunidad en su conjunto", explica. Por su parte, el diputado liberal belga Dirk Sterckx asegura que "el interés es hacer pagar a los usuarios el precio real, es decir, el precio total". ¿Qué debe ser gravado? La propuesta de la Comisión Europea aboga por que se tengan en cuanta en el cálculo de las tasas consideraciones como la contaminación atmosférica, acústica o la congestión. En el Parlamento Europeo, varias enmiendas al texto tratan de agregar "costes externos", como el dióxido de carbono, o suprimir alguno, como la congestión. En el debate previo al voto en la comisión parlamentaria, Sterckx informó que su grupo, ALDE, apoya que se conserven los tres elementos propuestos por la Comisión Europea. Sin embargo, el eurodiputado popular neerlandés Corien Wortmann-Kool consideró que no hay que incluir la congestión, porque "esto no hará que disminuyan los atascos, que también son causados por los coches en las carreteras". Es más, se mostró convencido de que "tasar a los camiones por congestión no la solucionará, y que aumentará los costes en el sector del transporte". Por su parte, el diputado neerlandés del grupo Independencia/Democracia Hans Blokland afirmó que "las tasas sobre el dióxido de carbono no son necesarias, porque se incluyen ya en los impuestos internos del combustible"; mientras que la eurodiputada austríaca de Los Verdes Eva Lichtenberger opinó que “todos los costes externos deben ser considerados". Reinvertir en alternativas ecológicas Por otro lado, la Comisión propone que los fondos recaudados a través de estas tasas se reinvierta en transportes alternativos o vehículos verdes, una idea compartida por los grupos políticos. Así, Blokland consideró que "el dinero podría usarse para el mantenimiento y la mejora de la infraestructura, por ejemplo con los impuestos del ruido se podría pagar paredes aislantes". El diputado Sterckx añadió a su vez que los ingresos podrían servir para disminuir los costes externos como el ruido, desarrollando por ejemplo "un nuevo tipo de asfalto menos ruidoso". El Khadraoui destacó que el impacto financiero para el sector "seguirá siendo limitado: supondrá de 4 a 6 céntimos de euro por kilómetro para un conductor". En cuanto a los camioneros, los costes operacionales estarían entre 1.50 y 1.70 euros por kilómetro, "un aumento del 3 por ciento", explicó el ponente, que agregó que la iniciativa "también estimulará al sector de transporte a ser más eficiente a la hora de pagar menos, usando por ejemplo camiones más nuevos, más limpios".