De hecho, en el transcurso del debate tuvimos que hacer una transacción sobre la resolución, porque la propuesta que el Partido Socialista había hecho decía literalmente: que el Gobierno español continúe liderando su oposición a esa directiva. Los grupos pidieron que quitáramos el verbo continuar, puesto que negaban que el Gobierno español lo hubiera venido haciendo hasta la fecha. Al final hicimos la transacción con el verbo liderar simplemente, sin establecer si debía continuar o no. Esto viene a cuento porque es preciso aclarar si el Gobierno español ha liderado o no y, desde luego, si va a seguir liderando porque ahora la resolución parlamentaria así lo establece; es decir, si lo ha hecho o no. Durante el debate se produjo alguna intervención, creo que de un partido político del Grupo Mixto y especialmente del Grupo Popular, negando que el Gobierno español se hubiera opuesto a esa directiva y afirmando que se había abstenido en la votación del Consejo de Ministros. ¿Puede usted aclarar esto? ¿Puede usted decir hoy alto y claro si el Gobierno de España se ha opuesto a esa directiva y si va a seguir liderando su oposición a la misma? Esa es la pregunta, señor ministro. (Aplausos.)
Señor ministro de Trabajo e Inmigración.
El señor MINISTRO DE TRABAJO E INMIGRACIÓN
(Corbacho Chaves): Gracias, señor presidente.
Señoría, el Gobierno, a través de este ministro, votó en contra de esa directiva en el Consejo, tal como recoge el acta de dicho organismo. Esa fue la posición que mantuvo el Gobierno español en la votación en ese Consejo.
Por cierto, ese día hice unas declaraciones diciendo que Europa acababa de adoptar una resolución que la acercaba más a la Europa del siglo XIX que a la Europa del siglo XXI y al día siguiente un ilustre miembro de esta Cámara, evidentemente no del Partido Socialista, afirmó que el Gobierno estaba confundiendo a la opinión pública pues la directiva solo sería aplicable en determinados sectores y con mucha flexibilidad. Es curioso que quien intentaba al día siguiente de la resolución del Consejo justificar una directiva absolutamente injustificable, ahora quiera pasar al Partido Socialista por la izquierda.
El Partido Socialista votó en contra de esa directiva y consiguió durante ese Consejo que otros países se unieran a la posición de España pues, cuando llegamos al mismo, solo Grecia estaba en contra, Chipre en abstención y los demás estaban a favor. Conseguimos liderar un bloque de descuelgue de esa directiva que le está permitiendo ahora al Parlamento Europeo jugar el partido para modificar la citada directiva. El Partido Socialista en Europa —y evidentemente el Gobierno con sus gestiones— seguirá liderando para hacer que esa directiva se cambie.
Me congratulo de que este Congreso de los Diputados haya aprobado por unanimidad su rechazo a la misma.
Ahora solo cabe una cosa: que cada uno de nosotros trabaje en su espacio ideológico para que el Parlamento Europeo no la apruebe.
El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor ministro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario