Lograr que universidad y empleo vayan de la mano. Este es el gran reto al que debe enfrentarse la sociedad europea para superar la crisis económica, según aseguraron los participantes en la audiencia 'Diálogo Universidad-Empresas' celebrada el pasado 23 de febrero en el Parlamento Europeo. Fomentar la movilidad y las prácticas en empresas e involucrar a las compañías en la vida universitaria fueron algunas de las propuestas defendidas para conseguir este objetivo. En algunos países europeos la tasa de paro entre los recién licenciados alcanza el ochenta por ciento, recordó el eurodiputado húngaro del Partido Popular Europeo, Pál Schmitt, ponente de un informe sobre diálogo entre universidades y empresas. "¿Es un problema de la calidad de los estudios? ¿O es que el sector privado tiene expectativas demasiado altas?", se preguntó Schmitt.
Según el rector de la Universidad húngara de Pécs, Róbert Gábriel, los centros académicos han de ser mucho más flexibles. "Es el momento de replantearse la estrategia de las universidades para servir a la sociedad", afirmó.En este sentido, la socialista española Teresa Riera, miembro de la comisión parlamentaria de Industria, Investigación y Energía y responsable de un informe de opinión sobre la materia, añadió que ahora, cuando la crisis económica más dificulta la inserción laboral, es el momento para "impulsar verdaderamente la cooperación entre universidades y empresas".
¿Cómo lograrlo?
Para Pál Schmitt, una vía para lograr que la cooperación entre empresa y universidad sea una realidad, sería incentivar la movilidad, no sólo entre países, sino también entre empresas y universidades. Defendió también una "colaboración mutua y eficiente" entre ambos mundos, por ejemplo, mediante la participación de las compañías en la formación de los profesores universitarios o la organización de periodos de prácticas en empresas.
No obstante, advirtió de que frecuentemente las empresas cooperan con las universidades sólo en áreas en las que pueden obtener beneficios directos. "Pero ambos deben entender que la colaboración tiene que extenderse a otros campos", aseveró.
La alemana del Partido Popular Europeo Doris Pack, sugirió a su vez que la Unión Europea debería poner en marcha una plataforma en la que se compartieran buenas prácticas de cooperación entre universidades y empresas a nivel regional, nacional e internacional.
Iniciativa empresarial
El informe de Schmitt asegura además que las perspectivas profesionales de los jóvenes titulados mejorarán si las instituciones de educación superior fomentan la innovación y una mentalidad empresarial entre los estudiantes, alentándoles, por ejemplo, a crear sus propias empresas.
El desarrollo de un sistema de seguimiento de los licenciados para evaluar la utilidad de los programas educativos y facilitar el acceso de las personas mayores a estudios universitarios son otras de las medidas propuestas, que mejorarían además el aprendizaje permanente de los europeos.
A este respecto, el informe, cuya aprobación definitiva se votará a finales de mayo, recuerda que "uno de los mensajes clave es el de aumentar el nivel de inversión en los recursos humanos de Europa para dar prioridad al principal activo de la Unión Europea: su población, que es el centro de todas las políticas de la Unión".
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