El Congreso de los Diputados se pronuncia contra el cambio climático.

El Pleno del Congreso debatió una moción presentada por el Grupo Parlamentario de Esquerra Republicana-Izquierda Unida-Iniciativa per Catalunya Verds, sobre la lucha contra el cambio climático y el papel de España en la Conferencia sobre el Cambio Climático de Naciones Unidas en Copenhague, que fue aprobada con 345 votos a favor y uno en contra en los términos de una enmienda pactada con el PSOE.

“El Congreso de los Diputados insta al Gobierno a: 1. Asumir una posición de liderazgo en el proceso negociador de la reunión de la Conferencia de las Partes (COP 15) de la Convención sobre cambio climático que se celebrará en diciembre en Copenhague con la finalidad de alcanzar un acuerdo ambicioso y vinculante que englobe a todas las Partes de la COP, y respete los principios del Plan de Acción de Bali de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático (FCCC/CP/2007/6/Add.1).
2. Que impulse un acuerdo con responsabilidades comunes pero diferenciadas de los países, que explicite los compromisos legales de cada Estado parte y tenga en cuenta los principios de equidad, integridad ambiental y flexibilidad para que el cambio de modelo se realice de una manera justa y solidaria.
3. Que en caso de que el acuerdo de Copenhague requiera desarrollo a posteriori, sólo sea para reforzar su valor jurídicamente vinculante y concretar los elementos accesorios restantes.
4. Impulsar un acuerdo que incluya el grado de ambición global, objetivos de reducción de emisiones de los países industrializados y acciones domésticas de los países en desarrollo, grado de apoyo financiero y tecnológico a los países en desarrollo, fuentes e instituciones de gestión de estos recursos económicos, objetivos de reducción de las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación forestal, otras actuaciones en materia forestal, marco de aplicación a las emisiones derivadas del sector marítimo y aviación y régimen básico de implementación del acuerdo, así como mecanismos para garantizar su cumplimiento por parte de los países industrializados.
5. Liderar un acuerdo que contenga un marco de acción en materia de adaptación al cambio, que tome en consideración el papel catalizador de la Convención Marco de Cambio Climático y que enfatice el carácter regional de las actuaciones.
6. Liderar un acuerdo que incorpore una evaluación regular de la eficiencia de las medidas en la reducción de emisiones, en los plazos temporales fijados por el Consejo Europeo con la finalidad de comprobar en qué medida están cumpliendo con las expectativas o si es necesario emprender acciones correctivas o dedicar recursos adicionales.
7. Liderar que en el acuerdo se incorpore una transición económica justa para los trabajadores que reoriente el patrón de crecimiento económico mundial hacia la creación de una economía con bajas emisiones, basada en una producción y un consumo más sostenibles, promoviendo estilos de vida sostenibles y un desarrollo resistente al clima pero velando también por una reconversión justa de la fuerza laboral.
8. Ofrecer el apoyo financiero adicional necesario para luchar contra el cambio climático en los países en desarrollo movilizando en torno a los 100.000 millones de euros al año 2020, para permitir la acción en favor de la reducción de la deforestación, la adaptación a los efectos del cambio climático y la transición hacia tecnologías limpias.
9. Apoyar una financiación inmediata, a los países más vulnerables así como los menos avanzados para la puesta en marcha del acuerdo y cubrir sus necesidades más acuciantes.
10. Apoyar un mecanismo efectivo de reducción de las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación de los bosques, movilizando recursos públicos y otros instrumentos que con un valor anual suficiente garantice el alcance de los objetivos.
11. Acordar la puesta en marcha de un mecanismo tecnológico que incluya las medidas necesarias para promover el desarrollo y transferencia de tecnologías a gran escala, incentivando la participación activa del sector privado mediante un compromiso claro de inversiones públicas.
12. Que el Gobierno defienda que el Plan de Acción de Eficiencia Energética de la UE signifique compromisos vinculantes de ahorro de energía a nivel comunitario.
13. Que el Gobierno presente en el plazo de seis meses tras la Cumbre de Copenhague un informe evaluando los costes económicos, sociales y ambientales, así como los retos y oportunidades que el acuerdo alcanzado presenta para la economía española.”